10 consejos para alargar la vida de las flores. Desde floristería Mallorca te queremos ayudar a que tus ramos y flores cortadas duren más tiempo.
Ya sea un ramo de rosas regaladas por un ser querido, un manojo de margaritas recién cogidas del campo, unas peonias de la huerta o un ramo de tulipanes comprado de camino a casa. Hay algunos consejos que te ayudarán a mantener las flores frescas y bonitas durante más tiempo.
Para comprobar si una rosa es fresca, tienes que apretar la flor en el lugar donde comienza el tallo y termina con una yema. Si esta parte de la flor es blanda significa que no es fresca. Si por el contrario es duro, esta flor es fresca.
El mantiene la vida de la flor. Cuanto más tiempo permanece la flor sin agua, menos tiempo aguantarán. Por lo tanto si estas comprando flores y quieres que aguanten más tiempo, realiza los siguientes consejos.
Para mantener el agua limpia más tiempo limpia todos los pétalos y hojas marchitas. Es muy importante limpiar el tallo que se va a introducir en el agua
Las hojas en el agua contribuyen a la formación de bacterias que son perjudiciales para las flores. Es más cuando las hojas caen al agua se vuelve turbia y huele a podrido.
Antes de poner las flores en un florero, hay que prestar atención a la base de los tallos. Es posible que algunos de ellos se estén secando. Tienes que cortar estas partes.
Corta el tallo entre 3 y 5 cm. Tienes que cortalos debajo del grifo o sumergidos en un recipiente con agua. Se hace de esta forma para que las burbujas de aire no obstruyan los vasos vegetales del tallo y no interfieran en la absorción de agua. Hay que cortar la flor en un ángulo de 45 grados para aumentar la superficie del tallo que absorbe agua.
Lo ideal es cortar el tallo diariamente o días alternos alrededor de 1 cm. Esto permitirá a la flor recibir un flujo estable de nutrientes y agua.
En la mayoría de los casos las tijeras aprietan demasiado el tallo provocando así un daño en el tejido. Por lo tanto para evitar daños en el tallo es mejor utilizar un cuchillo afilado o en su defecto unas tijeras de podar que no chafen el tallo.
Es muy importante lavar el florero con agua caliente y jabón antes de poner las flores. Esto eliminará las posibles bacterias y microorganismos perjudiciales para las flores.
Algunas flores crecen incluso después de que hayan sido cortadas. Por ejemplo, las anémonas continúan creciendo y consumen enormes cantidades de agua cada día.
Estamos acostumbrando a llenar el florero con agua del grifo. No hay nada de malo en eso, pero si quieres alargar la vida de la flor tienes que llenarlo con agua del grifo filtrada.
Una vez cortada la flor deja de recibir nutrientes de la tierra. Se convierte en nuestro trabajo facilitarle los nutrientes necesarios para alargarle la vida.
En muchas floristerías y tiendas especializadas puedes encontrar nutrientes en polvo para conservar la flor cortada. El bicarbonato tambien se puede utilizar junto con el nutriente para la flor (3/4 de cucharita de postre para un litro de agua). Eso te ayudará a tener el agua limpia y transparente, y realentizará la formación de bacterias y microorganismos dañinos. Con unas gotas de lejía puedes obtener el mismo resultado que usando bicarbonato. Importante no excederse con las cantidades de bicarbonato o lejía puesto que podriíamos destruir la flor antes de lo debido.
A casi todas las flores les gusta la humedad, por lo que es bueno pulverizarlas con agua una o dos veces al día.
Las flores aguantan más tiempo en sitios frescos, por lo que es aconsejable moverlas a estos lugares por las noches. Mantenerlas alejadas de chimeneas, radiadores, el calor y la luz directa del sol.
La temperatura también es importante en el momento en el que se corta la flor. Si tu mismo las cortas lo mejor es hacerlo por la mañana cuando la temperatura es más baja.
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